Mendieta: “Es el plan de venganza de Carrió”

“Ayer comenzó la fase destituyente de la Neo-Unión-Democrática” afirmó la Coalición Alternativa por una Nueva e Independiente Nación (CANINA) que repudió el uso de la Justicia al servicio de la desestabilización”

La Mesa Nacional de la Agrupación CANINA afirmó hoy que “ayer comenzó la fase destituyente de Elisa Carrió, que sólo tiene como objetivo generar la violencia e impedir a reconciliación y la necesaria paz de los argentinos” al tiempo que manifestó su repudio al uso de la Justicia al servicio del golpismo.

La Agrupación CANINA “repudia en forma enérgica la operación de prensa montada con la detención del Presidente de la Sociedad Rural de San Pedro así como también la imputación realizada por el Fiscal Federal de San Nicolás, Juan Murray contra Margarita Stolbizer, el Intendente de San Pedro, Mario Barbieri y dirigentes agropecuarios que participaron de protestas en la Ruta 9, a quienes acusó de violar el Articulo 184 del Código Penal”.

“Repudiamos la vocación de la Neo-Unión Democrática que, usando los resortes de los que dispone, quiere lograr que la sociedad se enfrente”

En declaraciones a la prensa, el presidente de CANINA, Mendieta, aseveró: “Este es el plan de venganza de Carrió, que incluye la victimización de los productores agrícolas y la utilización de elementos afines en la Justicia en el marco de una plan golpista y desestabilizador”.”

El jefe de CANINA cargó toda la responsabilidad sobre la ex diputada nacional del ARI: “Es una vergüenza y una provocación, tiene clara intencionalidad política y demuestra a las claras hasta qué punto Carrió y la NUD manejan la Justicia y los medios de comunicación a su libre albedrío, en un marco de cooptación o presión inadmisibles”

Al mismo tiempo llamó a “mantener la dureza de las convicciones, no tener miedo, no responder a la provocación y practicar el derecho de resistir a la oposición”.

Hasta acá la gacetilla. ¿Suena de lo más ridícula, no? Una locura, una irresponsabilidad, un ejercicio de violencia discursiva, paranoia y fanatismo oficialista. Ok, miren. Quería ver que se siente.

La cocina de Artepolitica

En un rato, en Artepolitica, la primer videoentrevista producida por este colectivo. Pero como la muchachada no descansa, ya estamos haciendo un profundo debate para decidir quién será el protagonista de la segunda.

Acá va la cocina de AP, para que vean que las cosas nos las tomamos con seriedad.

Vía mails:

MEC: “Che, como mide Cafiero, me encantaría entrevistarlo”

http://mundo-perverso.blogspot.com/2008/05/y-un-da-cafiero-midi.html

Mendieta: “Jejeje. Conseguí los teléfonos de su secretario privado. Ahí va la segunda entrevista”

Hal: “¿ese era Cafiero o el abuelo de los Simpson?”

MEC: “Che, dios quiera que yo llegue a la edad de Cafiero en ese estado”

Hal: “Alá Todopoderoso permita que yo llegue a la edad de Cafiero sin sus infinitas agachadas”

Mendieta: “Hal: no dudo que ud. lo logrará. Mas difícil será que también logre -Ud. o yo- ser ministro, diputado, gobernador, senador, etc., etc.”

Hal: “Querés que te haga una lista de todos los ilustres que llegaron a diputados, senadores, ministros, etc.? El camino es la victoria, pequeño saltamontes”

Mendieta: “Me confunde Hal. Si el camino es la victoria (onda optimista, o sea, "vamos, vamos, que ganamos"), firmo al pié. Si ud. quiso rememorar la carriotista "la victoria es el camino", esa especie de pizca de cristianismo berreta, Osho y zen para aeropuertos, paso.”

MEC: “Dígame, Hal querido, ¿qué persona de 80 años o más de nuestro mundo político cubre sus estándares exigentes?”

Mendieta: “Sigamos con las chicanas. Creo que este intercambio se merece un post.”

MEC: “¿Acaso prefiere, Hal, a Raúl Ricardo?”Digo en serio: nombre uno”

Al rato:

MEC: “¿Y, Hal? No sea cosa de borrarse como Casildo”.

Hal: “Por supuesto que, de tener que elegir, me quedo con Raúl Ricardo. Pero para que no me acuse de gorila le nombro un peroncho que murió jovato y digno después de haber llegado más lejos que el fracasado de Cafiero: H. J. Cámpora.”

Mendieta: “Eso es jugar sucio. Muertos no valen. De ahora papá!!! Vivitos y coleando...Cuando morimos todos nos merecemos la Unidad Básica o el Comité con el nombre. Todos!”

Hal: “No sé si todos, como diría la Panda de Arnet”

Mendieta: “Listo entonces. Sanseacabó el debate, Hal conducción con la consigna "todos no". Así que, cuando entrevistemos a Antonio en su casa, y nos invite a un asado, y nos cuente anécdotas de 60 años de política argentina, él no viene"

Hal: “Depende de la pastilla que le toque tomar ese día al señor”

Mendieta: “Era joda Hal. Los perucas no dejamos a nadie afuera de un asado. Vos venís también y le preguntás, en vivo y en directo, si ese día tomó la roja o la azul"

Hal: “Yo quiero saber qué se siente haber perdido la interna del PJ con un tipo de apellido capicúa”

Escriba: “Para Hal. Espero respuesta sobre "El rol del Estado en el pensamiento radical" (fijate cómo queda la frase ¿no?, 'pensamiento radical')

Hasta acá, el debate cibernético de hoy. Después de 20 años, en aquel lejanísimo 1988, la primer y última vez que literalmente lloré por el resultado de una elección, ya era hora que, gracias a Antonio Cafiero, me divirtiera un rato. Todavía no estamos a mano, Tony.

El error del monocultivo temático

Hace 75 días que el país casi que no habla de otra cosa: el conflicto “del campo”. Que las organizaciones patronales del campo no hablen de otra cosa está bien. Que los medios centralicen su agenda en esto es natural. Lo que es imperdonable es que el gobierno nacional no hable de otra cosa. Mejor dicho: que no haga otras cosas.

Demos por cierto la tesis oficial de que aflojar en este tironeo sentaría un mal precedente sobre la gobernabilidad (¿se acuerdan de este concepto?) y de su capacidad –legítima- de conducir los destinos del país. Que hacerlo sería perder capital político a futuro, margen de maniobras, poder en el mediano y largo plazo. Hecho. Lo notorio es que, de persistir en este inmovilismo, ese fantasma a futuro es el que se corporiza en el presente. Y el futuro llega hoy.

No todos los argentinos somos “el campo”. Hay otros sujetos sociales, económicos y políticos pastando por ahí. Es hora de interpelarlos. Con otra agenda de gobierno, con acciones, con propuestas. Un paquete de medidas contra la pobreza y la desigualdad, ponele: aumento de jubilaciones, rebaja del IVA para la canasta básica, un plan universal de ingresos para los pibes. Cosas así. Medidas que fundamenten -más allá de la retórica- el por qué este gobierno está en una encrucijada con un importante sector de la economía nacional.

Lo malo de estar mucho tiempo en una mala situación es que te terminás acostumbrando y aceptándolo como natural. ¿Qué tal si se mueve el tablero?

De los laberintos se sale saltando el alambrado.

Apostillas de Mayo

Viernes por la tardecita. Buenos Aires.

Mi viejo es jubilado con la mínima. Cuatrocientos manguitos. Me convida unos mates. Y me cuenta que está preocupado por el país. Que hay que arreglar con el campo, que todo anda demasiado mal, que no hay diálogo y así. (Mi viejo es un peronista medio inexplicable: en los 40 era demasiado pibe y demasiado clase media como para hacerse peronista. Para colmo era porteño. En los 70 ya andaba grandecito como para ser de la JP y revolucionario. Para colmo se había ido a vivir a un pueblito. Es un peronista de los realmente existentes: le jode que haya pobreza e injusticias, cree en el trabajo antes que en las finanzas, nunca sirvió para ser patrón y es uno de los muchos que conocí que fueron concejales como manera directa para empobrecerse. No es de derecha, claro que no. Pero tampoco es de izquierda. O sí: una izquierda que no teoriza ni cree en la lucha de clases).

Yo me caliento ante su discurso, que repite tópico a tópico el de los medios de comunicación. Hablamos de redistribución de la riqueza, de la torta. Me pongo enfático y el empieza a aflojar y a darme la razón. Pero en un momento me larga: “Sabés qué. Tenés razón con lo de la inflación. Yo tuve que dejar de darme el único gusto que me quedaba: comprar el diario todos los días, leer deportes y hacer la claringrilla. Está jodida la cosa, así que lo único que espero es que no empeore más”. Ahí se me va al carajo el énfasis y siento una tremenda vergüenza. La primera del fin de semana.

Sábado por la mañana. Arrecifes.

Llegando a Arrecifes, a un costado de la Ruta 8, está el campamento del “campo”. Hay unos diez tipos tomando mate, un lindo fuego con un costillar asándose, varias camionetas nuevitas y unos diez tractores que dan pena de lo desvencijados y herrumbrados que están. Es evidente que esos no son los tractores que usan cotidianamente en sus hectáreas, esas que hoy cotizan como 10 mil dólares la unidad.

Al costado de la vía, pasando la ciudad, una villa miseria como dios manda. Unos dos o tres kilómetros de villa. Los pibes revuelven la basura que cae de este lado del terraplén, la ropa cuelga al sol entre rancho y rancho y suena una cumbia a lo lejos. Estamos en el corazón de la pampa húmeda, después de cinco años de esplendor agrícola. El derrame por acá no pasó. Pienso en qué pasaría si dejáramos en paz al campo en vez de seguir metiéndoles las manos en sus bolsillos. Pienso en que una sensación de mierda me crece en la panza.

Sábado por la tardecita. Pergamino.

No hay una sola habitación de hotel. Unos hablan de que muchos van para Rosario y hacen noche acá. Otros dicen que hay un casamiento en la Sociedad Rural y que toca Pimpinela. Debe ser eso.

El piquete del campo al costado de la ruta es calcadito del de Arrecifes. Tractores de museo, camionetas con olor a nuevo. Hay banderas argentinas al por mayor y muchas más porciones de asado que comensales. Aunque parezca mentira, el tema de conversación no es el acto del domingo, ni el gobierno ni las retenciones. Es la sequía: tres manifestantes confiesan que apenas llueva no sé cuantos milímetros se dejan de boludear en la ruta porque hay que ir a sembrar. Así dicen, mientras se ríen: “boludear en la ruta”.

En las afueras de Pergamino, lejos del cruce y de esas cuadras con concesionarias de cosechadoras rojas de ocho metros de alto, también hay villas. También suena una cumbia. Como en Arrecifes, como en Moreno, como en Matanza, como en Posadas, como en Rosario, como en Salta. Hay un solo país: el de la desigualdad.

Domingo.

El cielo es celeste como en las estampitas. Y el sol es de mayo. Escucho los discursos por la tele. Todos. Me subo al auto para volver. El dolor de panza ya llegó al pecho. Es impotencia y vergüenza y dolor. Me siento un extranjero en mi propia patria.

No quisiera ser la mujer de De Angelis

La mejor droga. La que pega más fuerte y a la cual te hacés adicto más rápido: la fama. La exposición pública. Las conferencias de prensa. Los movileros de radio y TV.

He visto tipos de lo más inteligentes que aparecen una vez en un canal de cable en un programa a las dos de la tarde. Al otro día salen de su casa y la camarera del bar primero lo relojea y cuando le trae el cortado (“con edulcorante, por favor. Es que me empecé a cuidar, viste”) le dice a la flamante estrella mediática, con sonrisa seductora de camarera: “Ayer lo vi en la tele”. Ahí tenés que ser muy pero muy pero muy macho para no creerte el George Clooney de la política argenta.

Bueno. Todo esto para decir que, después de los kilos de paco que se fumó en los medios el Melli, no me gustaría ser la mujer de Alfredo De Angelis. Pobre señora. Dentro de unos días todo va a volver a la verde normalidad de las hectáreas de soja. Y el señor va a estar insoportable encerrado en su maseiferguson. En unas semanas va a pasar por el pico de su crisis de abstinencia: desde las 5 de la mañana va a mirar cada 30 segundos el celular preguntándose por qué carajo no suena y hacia el mediodía se va a ir hasta el centro de Gualeguaychú a dar la vuelta del perro por la plaza y saludando desde la ventanilla de la chata a los pibes que salen de la escuela.

Insisto: desde aquí mi solidaridad con la mujer. Va a necesitar mucha retención para no mandarlo a la mierda.

Autocrítica: nos pasó por ansiosos, che.

El pasado 25 de abril pegamos un ladrido en Artepolítica. Era éste. No se molesten en linquear si les da fiaca. Decíamos algo así: “Si este clima de crisis dura un par de días más van a salir desesperados a despegarse del oficialismo. Pienso en un ejemplo. Me viene a la cabeza un Aníbal Ibarra. Ahí está: juego una bolsa de Eukanuba Premium a que en cualquier momento lo veo en la tele o en una entrevista jugando de “independiente”.

Bueno, acepto humildemente mi error (seguramente producto de algún tipo de animadversión personal que desconocía para con él). El clima de crisis del Gobierno nacional siguió y Aníbal tardó más que un par de días en salir a despegarse: tardó 20. Miren, miren.

Uno a veces se equivoca.

Hoy ladramos en la comunidad artepolitica

No. No es lo que están pensando. No me refiero a qué cosas hubieran pasado en la política nacional si Néstor Kirchner no hubiera salido segundo en la primera vuelta allá por el 2003 y luego el innombrable hubiera desistido del balotaje. Ese ejercicio contrafáctico (¿se llama ucronía o algo así, no?) podría llegar a ser interesante, pero no es el objeto de este post.

Lo que quiero decir es otra cosa, más radical si quieren, con perdón de la expresión. Planteo analizar la posibilidad de que “el kirchnerismo” no existió y no existe. Seguir leyendo en Artepolitica.

Abrir la cancha

Cuando el partido está cerrado. Cuando aunque tu equipo vaya al frente, choca una y otra vez contra la muralla defensiva del adversario. Cuando tirás uno y mil centros que vuelven más rápido de lo que fueron hasta tu propio lado de la cancha. Cuando los minutos pasan y pasan y el murmullo de la popular empieza a escucharse hasta en la tribuna visitante.

Cuando pasa todo eso. Corazón, mente fría, pases cortos y, sobre todo, abrir la cancha.

Desde hoy, en Artepolitica, juegan todos los que quieran jugar. De local. Vamos, vamos, ¿quién se prende?

Sin subtes, todos bajo tierra.

Hoy no llueve. Hoy no hace tanto frío. Hoy no hay fútbol.

Hoy hay paro de subtes sorpresivo del troscomodismo, siempre pensando en el pueblo.

El resto sigue todo igual. O sea, mal.

Es lunes. ¿Hoy se pudre?

Agenda de hoy

Padre MUGICA Una vida para el Pueblo 11 de mayo de 1974 - 11 de mayo de 2008

DOMINGO 11 de MAYO 18 Hs.
Homenaje en PLAZA SALABERRY

(Av. J. B. Alberdi y Pilar - Mataderos)

y posterior MARCHA DE ANTORCHAS
hasta Parroquia San Francisco Solano

Organiza:

Comisión de Homenaje al Padre Carlos Mugica

Invitan: Centro Cultural Forja (Mataderos) / Espacio Cultural ¨Sebastián Borro¨ / Escuela de Psicología Social Comunitaria Liniers Villa Luro / Centro de Participación Crítica y Política de ¨El Olimpo¨ / Parroquia del Buen Consejo / Movimiento Barrios de Pie / Movimiento Libres del Sur / Radicales por la Concertación (Comuna 9°) / Ex Alumnos del Damaso Centeno por M.V.J. / Comisión por la Memoria de Liniers, Mataderos y Villa Luro / Agrupación Envar el Kadri / Santuario San Cayetano / Comisión por la Memoria de Lugano, Soldati y Villa Celina / Parroquia Santa Cruz / ARI Autónomo (Circ. 21°) / Partido de la Victoria (Circ. 21°) / Frente Grande (Capital) / Encuentro por la Democracia y la Equidad (E.D.E. Flores, Floresta y Comuna 9°) / Centro Cultural El Surco (Mataderos) / Unión de Empleados de la Justicia de la Nación / Club Larrazabal.

Grande Beto.

Último momento: me están cargando

Juro que pensé que lo habían cagado a trompadas a la salida del subte en el Congreso o algo así. El título prometía: “Un diputado y agrupaciones kirchneristas embistieron contra el periodista de Clarín Julio Blanck”.

Cliqueás ahí y el primer párrafo dice: “En un nuevo episodio de la campaña oficialista contra Clarín, el diputado ultrakirchnerista Carlos Kunkel y una agrupación de jóvenes K cargaron contra el periodista de Julio Blanck por una columna publicada en la edición de hoy del diario”.

Y sí. O lo cagaron a trompadas o lo cazaron de las solapas del traje y lo zamarrearon un rato al grito revolucionario de “TN miente, TN miente!!”.A Kunkel se le sale la cadena fácil, estaba acompañado de varios imberbes que están haciendo la revolución pegando calcos, se envalentonaron en grupete y se le fueron al humo. Ahora sí, cagamos, terminamos de volcar. Y yo charlando con Eulogia, Pablo y Hal de Merleau-Ponty y Bourdieu. Puta, la famosa jactancia de los intelectuales, el país en llamas después de este salvaje atentado contra la prensa y nosotros boludeando. Lo único que espero es que no lo hayan lastimado, pobre tipo, ¿dónde estará internado? A ver…sigamos leyendo:

“Kunkel sostuvo, en una entrevista a Radio Nacional, que Blanck ‘tuvo el tupé de decir que solamente compartimos la política que está desarrollando este gobierno peronista los fanáticos, los alcahuetes y los resentidos’".

“En su columna de hoy, Blanck había sostenido que ‘el discurso oficial tiene menos seguidores ahora, cuando la imagen se deteriora, la inflación no se detiene y cualquier camino de diálogo es dinamitado’. Las palabras de Kunkel hacen referencia a una frase en la que el periodista advertía que ‘alrededor del poder acampan los fanáticos, los alcahuetes y los resentidos’”.

No entiendo. El que escribió esto tiene menos periodismo que Maru Botana. ¡Las 5 W, papá! Ya dijiste el qué (“embistieron, cargaron”) y el quiénes (“Kunkel/una agrupación de jóvenes K”). Por lo menos te falta el dónde lo embistieron, el cuándo lo mandaron al hospital, el parte médico. Estoy preocupado, esto se fue al carajo y vos me hacés seguir leyendo hasta al final. “¡Eulogia! Poné TN, prendé la radio”, me debo haber quedado sin batería en el celular, ¿cómo nadie me llamó para contarme esta animalada? Tiene razón Manolo, no funciona la red de compañeros, estamos al horno. Qué raro, no se escuchan cacerolazos. Fue más o menos lindo, de a ratos, a veces, mientras duró, ¡Valor Mendieta, lleguemos al final del último momento!

“Por su parte, dirigentes de la agrupación kirchnerista La Cámpora, que responde a Máximo Kirchner, hijo mayor de la presidenta de la Nación, se manifestaron hoy ‘agredidos’ por la nota. En una conferencia de prensa, uno de sus referentes, el legislador porteño Juan Cabandié, argumentó que ‘Clarín actúa de esta forma porque estaban acostumbrados a que con tres o cuatro tapas de diario, determinados actores políticos retrocedían en sus posturas, y eso se ha terminado’".

Pero… ¿cómo? ¿Una declaración a Radio Nacional y una conferencia de La Cámpora? ¿Con el buenazo de Juan como argumentador? ¿Eso fue todo? ¿Por esto tuve palpitaciones? ¡La conchadelalora, mirá que llevo años, eh! ¿Cuándo me voy a dar cuenta que hay que desconfiar un poquito de los titulares? Ma sí, me voy a dormir. Apaguen todo, che.

Los modos de la siesta

La relación de uno con la siesta es ambigua, cambiante, con sus idas y vueltas. El recuerdo más lejano es casi siempre traumático: “es la hora de la siesta, andá a dormir”, dicen las madres o los padres. ¿Quién tiene ganas de dormir a los cuatro o cinco años?

Más tarde, unas 20 estaciones después, vuelve a ser primavera y los aromos en flor te pintan las manos de amarillo. Ya tenés unos 10 años y te amigás por vez primera con la siesta. Ese momento después del almuerzo es como un primer esbozo de independencia y libertad, una práctica a futuro: los grandes se han ido a dormir y uno es el feliz propietario del patio del fondo, de la caja de herramientas que no se puede tocar salvo para alcanzarle el martillo o la pico de loro al padre cuando cambia la exclusa de la bomba de agua que hay, herrumbrada de salitre marino, a mitad del pasillo. Ahí hacés otro aprendizaje: el secreto para salir airoso cuando se burla la ley, es ser metódico. Si arriba de todo estaba la cinta aisladora y el destornillador, así deberá quedar cuando sean las cinco. Al poco tiempo, el patio del fondo te queda chico y empezás a treparte al paredón –ese con el salpicré sin terminar, donde se esconden los rasguños y el tétanos- para meterte a investigar la obra en construcción. Eran tiempos, en esas siestas de primavera, en que escuchaba por primera vez la palabra “dúplex” y sonaba a modernidad y progreso.

Pero eso tampoco alcanzaba. Hay un mundo ahí afuera. Y entonces renunciás al capitalismo del patio propio y, en cooperativa con otros pibes y el perro, te rajás para los médanos de la playa a cazar lagartijas entre los tamariscos. O para el otro fondo, el del pueblo. Ahí empieza el campo y hay ranas en los bañados, yararás en las cortaderas y esqueletos de cuises secándose al sol. Se tejen ahí, en esas siestas de verano, las únicas amistades que serán -aunque al Gordo Germán y a Pirincho no los vea hace un cuarto de siglo; aunque Cumpa haya muerto ese año aplastado por un Rastrojero- para siempre.

Llega el otoño, inexorablemente, y las siestas adolescentes. El pueblo ya te queda chico, sobre todo en marzo, cuando las chicas turistas ya se fueron y uno necesita convencerse de que va a volver a enamorarse, por necesidad, de alguna compañera de escuela. Es que no hay otras. Ahí salís a caminar por la costanera, pateando las piñas de los pinos, ponele que son las tres de la tarde, y te cruzás con chicas que tratan de convencerse, también, de que uno no está tan mal. Es que no hay otros ni otras y se viene el frío y la niebla.

Claro que hay siestas, aún en pleno invierno, que tienen lo suyo: el sol logra ganarle de vez en cuando a las nubes y te sentás en la vereda contra una pared, al reparo del Sur que sopla fuerte, y te dedicás toda una siesta a masticar unos pastitos que asoman de las juntas de las baldosas. Nadie te apura, las gaviotas aletean contra el viento y tratás de entender cómo va a ser tu vida. En aquellas tardes uno sabía, positivamente, que algún día, que no era ese, iba a entender.

Luego las cosas, y las siestas, empiezan a pasar cada vez más rápido. En esta ciudad dicen que no duermen la siesta, en esa oficina dormí la siesta en el escritorio, en esa facultad dormí la siesta a las diez de la mañana de un sábado, con los ojos abiertos, escuchando ese teórico. Me acosté a no dormir la siesta con el sol entrando por la ventana del monoambiente con la compañera que a la otra semana me dejó de regalo su cepillo de dientes a cambio del llavero. Quiero pensar que fue en una siesta que me decidí a ser padre. Tuve una siesta inolvidable la primera vez que la cachorra durmió, sin llorar, dos horas de un tirón al lado mío en la cama. Siestas que no dormí por vago, siestas que no dormí por laburar y siestas que duraron años.

Hoy a la mañana, tempranito, viernes, en este otoño, me desperté pensando en esto. Otras de las razones por las cuales debemos hacer política es que todos tendríamos que tener garantizado el derecho a una siesta. Que es uno de los tantos modos de una sencilla felicidad. Pavada de plataforma, ¿no?

Trabajo de campo: midiendo a la clase media

El Gobierno malicia que rectificar algo es una debilidad que trasciende al “campo”, que se propagaría más allá de este otoño hostil. Lee que le podría ser cobrada con usura por otros sectores de interés. Ese albur podría suceder, es una virtualidad. Mantener el fuego del conflicto es un hecho, cuesta imaginar que beneficie al Gobierno y a la mayoría que representa.

Mario Wainfeld, Página/12, 8.5.08

Juro que el diálogo que voy a transcribir es cierto, de punta a punta. Lo escuché ayer, en el subte A, nueve de la mañana:

Dos señores, cuarentones, bien empilchados, lindos relojes de marca trucha en las muñecas, se dirigen a trabajar.

-Uy! La calentura que tenía Verón, un ecuatoriano lo fue a saludar y lo escupió.

-También quedó afuera Lanús, no?

-Sí. Los dos. Pero esta noche juega boquita y pasa.

-Ahh, sabés qué, ¿te enteraste que nos depositaron las vacaciones no tomadas?

-¿Cómo? Pero que hijos de puta que son. Hace quince días le pedí a …si me podían garpar eso y me dijeron que no. Te das cuenta, cuando les pedís te dicen que no y cuando no lo necesitás te lo dan.

-Y si, a mi me depositaron como 500 mangos, porque la mitad de las vacaciones me las había tomado. Aparte fijate en el recibo de este mes, porque cambió el básico.

-No, eso ya lo ví. Son los 400 mangos que teníamos en negro y que pidió el sindicato que se blanquearan. Y lo blanquearon nomás. Suben un poco las asignaciones, así ¿no?

-Sí, claro. La escolaridad de tus hijos y esas cosas. Que hijos de puta los del sindicato. Yo no entiendo. Porque si me decís que bancás al gobierno y te llevás algo a cambio…

-Claro, como los camioneros de Moyano. ¿Vos viste los sueldos que tienen los camioneros? Es una barbaridad, hermano. Pero estos conchudos son oficialistas igual.

-No se entiende, no se entiende. La verdad, seguir apoyando a estos tipos del gobierno es inexplicable, si son un desastre. Mirá los pobres tipos del campo. Yo no sé si los del sindicato son pelotudos o se hacen. Porque yo entiendo que apoyes a alguien cuando mejora tu situación, pero si no…

-Y, si. Si no, no se entiende.

-¿A qué hora juega Boca?

Perfil.com y los guapos virtuales de escritorio

Algunos lectores habrán notado que últimamente Mendieta anda preocupado por el nivel de agresividad que se nota en la argentósfera. Allá por fines de marzo había publicado esto, y luego metí varios comentarios en Artepolítica al ver como muchos comentaristas habían abandonado el sano ejercicio de discutir un post en base a argumentos y, directamente, se dedicaban a descalificar personalmente al autor del mismo.

Digamos que ya estamos acostumbrados a ver como en los foros de La Nación, Crítica o Perfil cientos de “comentaristas” nos regalan cotidianamente un rosario de racismo, fascismo, insultos, acusaciones de índole personal de lo más abyectas y linduras por el estilo. Confieso que su lectura me produce una profunda tristeza: que después de décadas de democracia aflore tan elevado nivel de violencia discursiva es un síntoma que debiera avergonzarnos como sociedad.

Esta tendencia se empieza a observar ahora, aunque en infinita menor medida, en los blogs (al menos los que cotidianamente consulto), pero creo que debemos hacer un esfuerzo conjunto, los autores y los lectores, para sofrenarlo. Y acá no se trata de oficialismo u oposición, si kirchneristas o carriosistas, si republicanos o populistas. Acá nos gusta debatir argumentando. Si a vos no te agrada eso, tomátelas. Rajá, pirá. Vaya a cucha.

Mendieta, aprovechando la democracia liberal en la cual vivimos, está en contra de la violencia -incluso de la discursiva- por dos motivos: por principio y por conveniencia. Por principio por razones éticas; y por conveniencia porque la historia nos muestra que cuando se entra en épocas violentas siempre terminan perdiendo los más débiles. Y ahí está nuestro corazoncito.

¿Por qué digo todo esto? Porque gracias al blog de Artemio me entero que Perfil.com acaba de inaugurar una sección que se titula ”Decíselo en la cara”, que es presentada así:

“Éste es un espacio para vos, que más de una vez hubieras querido cruzártelo en una calle para decírselo en la cara. Perfil.com te da la posibilidad: decíselo con todas las letras, pero con altura. No insultes. Cada día, habrá un personaje nuevo. Y no creas que es pérdida de tiempo. Perfil.com te asegura que todos ellos van a mirar este medidor de imagen en tiempo real”.

Esto es un asco. Una verdadera porquería. Una obvia incitación (“Sé creativo, no insultes” es la invitación a la puteada) para que afloren los fantasmas más oscuros de los cibernautas. Y encima te lo venden como si fuera una “participación” de los ciudadanos en lo público.

Para colmo, no creo equivocarme al intuir que el 99% de los foristas que CON MAYÚSCULAS encadenan calificativos dinosáuricos, promesas de fusilamientos, menciones al “ya van a pagar cuando los agarremos” y amenazas por el estilo, serían los primeros en silbar bajito y cruzar de vereda si, de verdad, se los encontraran por la calle.

Porque atrás del teclado somos todos muy machos.

La comunicación: que alguien me explique, por favor.

La nota de Clarín es ésta. “Qué se esconde detrás del debate sobre la futura Ley de Radiodifusión”. Y es para leer con mucha atención. Permítanme resaltar algunas cosas que allí se dicen y que llamaron mi atención:

. Por empezar, el cierre: “La amplitud y riqueza de la comunicación está garantizada solamente por la debida rendición de cuentas del Ejecutivo sobre las cuestiones de interés público, y no, a la inversa, por el control del Estado sobre lo que se publica o lo que se dice en los canales y en las radios”. Esto sí que no lo sabía: ¿la amplitud de la comunicación está garantizada solamente por la rendición de cuentas del Ejecutivo?¿ Así que las empresas de medios no tienen absolutamente nada que ver?

. ¿Cuál es la importancia de contar que los referentes de distintas radios (que son “los referentes”, che?) se encontraron en Piégari de Puerto Madero?¿ Tan mal andamos que tenemos que chivear el nombre del restó? ¿Fue un canje?

De la cantidad de pavadas sobre el Observatorio de Medios, la mezcla de D´elia, Carrió, Moyano y Albistur, el “campo” y los “longos” (tristeza nao tem fin, profesor) ni ganas de escribir. Tan, pero tan berreta es la nota, tan pero tan amañada, que no sorprende que no lleve firma, algo inusual para una página 14 entera de domingo.

Licenciado Baleno, usted que la sabe lunga de estas cosas: ¿me haría el favor de ilustrarme?