18 febrero 2013

Grandes temas de los que tendríamos que ocuparnos y pelear



Entiendo, no sin esfuerzo, que el grave daño ambiental producido por la quita de árboles en la 9 de julio estén monopolizando nuestros cerebros y, sobre todo, muy especialmente, nuestros corazones. O sea: ¿cómo podríamos  apasionarnos de este modo si no estuvieran en juego aspectos nodales de nuestra argentinidad, es decir los valores más profundos que nos constituyen como Nación? Asumamosló: a los argentinos, podría decirse que incluso antes de que existiéramos como tales, nos gusta pelearnos. Y también nos gusta exagerar. Por eso, por ejemplo, como argentino, yo pongo que “ a los argentinos nos gusta pelearnos y exagerar”. Exagerando, claro. Y escribo esto porque me gusta pelear. Como a independistas y colonialistas, como a unitarios y federales, como a yrigoyenistas y alvearistas, como a peronistas y marcianos, como a Majul y el español. Así nos gusta pelearnos.
Entonces, como ya están resueltos temas que en otro momento podrían habernos hecho pelear, como por ejemplo la justicia social, la calidad de la educación y la salud pública, la matriz productiva de desarrollo nacional y huevadas por el estilo, y con el afán de no perder nuestras mejores tradiciones –por ejemplo, en este caso, la tradición de no aprender nunca de nada- ahora nos peleamos por unos arbolitos de mierda. Me parece muy bien y banco con todo mi ser.
Eso sí: agreguemos otros temas que hagan al futuro que todos anhelamos. Un futuro en que, lo importante, es ganar en la pelea que coyunturalmente estemos dando.
Particularmente, lo que me preocupa a mí es que nunca vamos a ganar la Davis con este clima de confrontación. Y que en la polémica Nalbandian-Del Potro yo hincho por el umpire. Una especie de tercera posición. 
Bien peronista, digamos. 

13 febrero 2013

La demagogia del abandono

Cortito. Muy cortito. Como el nuevo slogan de De Narvaez.
Recordemos: en 2009 era "Tengo un plan". Importaba cuál era el plan? Para nada. Esa es otra mentira de los que se han abandonado al marketing político pero tienen culpa de ello: "tenemos una plataforma que blabla". Las bolas. Al 99% de los humanos les importan tres carajos las plataformas de los partidos políticos. Porque el 99% de los humanos más o menos saben para dónde van a ir los políticos cuando lleguen a sus cargos y a dónde van a ir esas plataformas tan bien escritas que sirven, básicamente, para darnos trabajo a algunos y para reciclar papel.
Pero, detengámomos un segundito a jugar, precisamente, el juego del marketing político a secas. El slogan era "Tengo un plan". El tipo se plantaba en cientos de gigantografías (de su propiedad, ah, que ventaja tener cartelitos propios), en los spots de tele, en la radio y te chantaba "yo tengo un plan". O lo que es lo mismo te estaba diciendo: "yo sé perfectamente lo que tengo que hacer, la tengo clara, sé lo que hace falta". Era, publicitariamente, un tipo, De Narvaez, potente.

Veamos ahora el de 2013. Que no es, precisamente, el título de la solicitada que hoy aparece en los diarios, el "Ella o Vos". No. El slogan que está en los cientos de gigantografías (ah, qué ventaja tener cartelitos propios) es "Estamos con vos". O, lo que es lo mismo, "vos, votante, vos sí sabés lo que hay que hacer y por eso te acompañamos. Vos votá por nosotros que te acompañamos y vamos a hacer lo que vos nos digas que hay que hacer. Importa qué quieren hacer cada uno de los vos? Para nada. No le importa a De Narvaez ni al 99% de los vos que, como todo el mundo sabe, quieren 99% de cosas diferentes unos a otros.

"Estamos con vos". Que viene a traer dos grandes cambios con respecto a 2009 en la campaña de De Narvaez: por un lado, deja de utilizar la primera persona ("tengo") para comenzar a utilizar el nosotros ("Estamos"). Es como si estuviera sentado ahí, en las oficinas de Las Cañitas y los escuchara: "Francisco, como nos cansamos de decir que el gobierno es demasiado poderoso, hegemónico y con pretensiones de eternidad, tenemos que hacer un slogan que nos muestre como un colectivo importante, capaz de detenerlos, y para eso tenemos que mostrar que somos muchos, porque hay que dar la imagen de que no estás solo, que hay muchos que te acompañan, por eso vamos a usar el "estamos". Y como la figura de Ella está atravesando un desgaste, hay que borrar toda referencia al gobierno, a sus medidas, a su armado político. Es Ella nada más, aislada, sola. Ella es la inflación, ella es la inseguridad, ella, ella, ella. Todos los cañones apuntando ahí. Es un golazo Francisco".

Por otro lado, y aquí lo más interesante, le tira la pelota del quilombo a los votantes, los responsabiliza, les dice "nos tenés que decir qué hacer, nosotros te vamos a hacer caso en el Congreso". "Estamos con vos": Un modo literal y directamente demagógico y, por ende, berreta.

Es, en 2013, publicitariamente, un tipo impotente De Narvaez.

Ah, y ni me quiero poner a criticar la utilización repetida del "Vos" en los carteles. Basta decir que se usa en la frase y en el slogan. Unos vagos los publicistas de De Narvaez. Qué lindo debe ser chorearlo así.