04 agosto 2010

Coherencia


Buenos Aires, Argentina, 4 de agosto de 2010.
"El Senado es ya un cuerpo sin vocación, sin fuerza y sin alma." La senadora que dice esa frase, con los gestos y el tono del desaliento, ha pertenecido al oficialismo y a la oposición en los últimos años. Sabe de qué está hablando".

Buenos Aires, Argentina, 20 de septiembre de 2009.
¿Por qué el Senado puede alcanzar esos acuerdos que son imposibles entre los diputados? Desde que la República existe, el Senado se preocupa antes que nada de una cosa: de ser diferente de ese conglomerado caótico, maleducado y chapucero que es la Cámara de Diputados. Es muy probable que el proyecto aprobado en Diputados, tan lleno de imperfecciones y de amenazas autoritarias, sea modificado por el Senado y devuelto a la Cámara baja. 

¿El autor de las dos frases, en dos sendas columnas de opinión? El mismo: mi amigo personal Joaquín Morales Solá.  Que mantiene, an ambas, la coherencia de estar haciendo lobby desde las páginas de un diario a favor (o en contra) de determinados intereses. La primer frase no necesita de demasiadas aclaraciones, es de coyuntura: está enojado porque el Senado no garantiza una mayoría opositora capaz de avanzar en la eliminación de las retenciones, tal como viene, cual arquitecto de logia,  "cosiendo" desde la semana pasada. Pero recordemos la segunda frase: se había aprobado en Diputados la famosa Ley de Medios y JMS comenzaba una "operativo seducción" sobre el Senado, pensando que si lisonjeaba a los miembros de la Cámara Alta podrían frenar su sanción.

En definitiva: un tipo coherente, recto.
Lástima, en serio, todos los que le creen de buena fe.

Gracias Roni que me hizo recordar la columna vieja!

4 comentarios:

Jorge Devincenzi dijo...

Cuando la política se nutre del melodrama.
A Morales, que es Solá, le repica esa frase, real o ficticia, porque lo que quiere es cerrar el Senado. Y lo reafirma en eso de la cámara chapucera, etc.
Los huevos de la serpiente. De la serpiente de la dictadura

roni dijo...

De nada compañero!!!. Un verdadero orgullo que te haya servido el recuerdo de la columna de este otario

rinconete dijo...

Lo insólito es que esta gente logra crear, aún sin éxitos para lucirse, un piso mínimo de consensos.

Como aquello de que el legislador oficialista que defiende un proyecto oficialista es un zombie (por supuesto en el caso de que el medio sea opositor), que el oficialista que vota en contra del oficialismo es Espartaco, que el opositor que vota en contra de la oposición es un coimero y que el opositor que defiende un proyecto opositor es Thomas Jefferson.

Pero uno de los mayores éxitos de JMS y sus amigos es cristalizar en la opinión pública que la influencia del jefe de bancada, de los gobernadores, del Ejecutivo o de la clase política en general, sobre un legislador es nefasta mientras que si el mismo legislador vota en base a ¨creencias¨, a conversaciones con los ángeles, con sus hijas o con su curas párroco, o defendiendo lo que él sostiene que ¨le pide la gente¨, es un ciudadano ejemplar.

Anónimo dijo...

La coherencia es valiosa, precede a la ideo-logica