27 abril 2009

Saúl querido

Artemio cuelga este post y desde acá le agradecemos que nos haya hecho recordar.
Tiene razón: Saúl Ubaldini todavía no tuvo el reconocimiento que se merecía.

PD: tuve la suerte de conocerlo mientras fue diputado y fue un verdadero gusto. Las sobremesas en el comedor de los laburantes en el quinto piso del anexo, con viejos periodistas de la Cámara y Oraldo Britos, eran memorables. Uno de sus aspectos cuasi desconocidos, era que Saúl era un gran lector y muy culto.
Sí. Sindicalista y culto. ¿Y qué?

4 comentarios:

Mauri Kurcbard dijo...

En el 86 lo defendi de un ataque verbal de Alfonso cuando lo llamo "mantequita y lloron" con una bandera q colgamos en la Catedral q le decia a Alfonsin. "¿A quien mantequita?...veni, baja". Salio en la Libre de Fontevecchia con una leyenda q decia "ASI NO".
che mendieta..¿que leia Ubaldo?

Verboamérica dijo...

Totalmente

Meursualt dijo...

Che, se sabe que pasó con la página de La Bonaerense, que ahora no puedo entrar?

Lucas.- dijo...

Definitivamente... En días como estos le sobraría altura.