Campamento Rojo

Una vez hace un par de años me los encontré. Creo que era en Cafayate, Salta. O capaz en Córdoba, no recuerdo. Venía saliendo del hotel, donde me encontraba cómodamente instalado en una habitación que tenía sommier y ya había desayunado como desayunás en los hoteles -cuando comés cereales, yogur de vainilla, una rodaja de melón, jugo de naranja y otras porquerías que nunca harías si no estuvieses en un hotel-, y siento que en la plaza había un mínimo de alboroto, algunos cantos y hasta un bombo.

Sí. Eran ellos. Los del Partido Socialista con sus limpios trapos rojos y unas consignas muy divertidas que incluian la palabra "liberación". Hasta logré ver a los dos máximos dirigentes de la Juventud: Hermes Binner y Giustiniani, que hacían palmas y agitaban haciendo iupi, iupi. Todos re locos.

Estaban ahí haciendo su campamento anual, el mismo que ahora van a realizar en Mendoza.

Un cam-pa-men-to, muchachos. Campamento. En carpas. Durmiendo en carpas. En el piso. Un asco. ¿Se dan cuenta por qué nunca podría ser socialista?