Me encantan las discusiones que se forman en cualquier bar, un lunes cualquiera, en una primavera dulcemente lluviosa, en una ciudad que navega hacia la nada.
Por eso, a la tardecita, me siento en alguna mesa de la oficina del Negro, pido una Imperial y tiro un tema. Preferentemente, de algo que no sepamos mucho.
Hoy no fuimos nada originales: la crisis económica mundial. Aquí abajo, una apretada síntesis de las posiciones de los muchachos. Insisto: a ver si los blogueros económicos se juegan un poco y ponen un poquito de luz. ¿A dónde va el mundo?
El Negro viene a ser el más optimista. Este es el fin del hipercapitalismo financiero mundial, el derrumbe de los papelitos de colores de los derivados y un regreso a primeros planos de la economía real. Claro que, al suceder esto, se avecina una recesión mundial de la economía real, un progresivo y acentuado cierre de las economías mundiales y, agarrate catalina, eso va a pegar sobre todo en las emergentes, en la periferia. Los países centrales van a cerrar aún más sus fronteras y, bue, ya sabemos. Insisto: el Negro es optimista.
Mendieta se juega poco. Si la crisis no traspasa el campo de lo financiero, lo que viene es una mayor concentración en ese segmento: fusiones y adquisiciones y los consiguientes megaarchihiperrecontragrosos bancos de inversión. O sea: el avance del capitalismo con más capitalismo. Con lo cual van a ser aún más poderosos e influyentes. Con lo cual van a tener aún más poder de presión sobre los Estados. Sólo que ahora le van a pedir a los Estados más garantías. Mendieta piensa que los Estados nacionales van a tener más intervención en los mercados pero aún menos poder. O sea: más presencia, pero menos menos autonomía. Con lo cual podrían avecinarse tiempos de “presidentes” más dependientes de estos megaarchihiperrecontragrosos bancos. ¿Empleados? Eso sí, si la cosa se desborda hacia la economía real vamos corriendo a los botes y que se salven los buenos.
Manolito es el más drástico. “Viene un tiempo de restauración conservadora en el mundo”. Así, rotundo. Y sobrevuela la economía y la crisis para hacer un planteo mucho más profundo, geopolítico casi. “Está en riesgo latente la incipiente emergencia de la multilateralidad. Si para ordenar este desbande se ponen brigidos en USA y cierran el grifo de los dólares por el mundo, andá olvidándote de los mercados asociativos del sudeste asiático, la comunidad de naciones del Sur y Todos por Africa. Para colmo, si es que se derrumbara el Imperio como dicen los celebradores de desgracias ajenas, no hay nadie que quiera ponerse el sayo. Es más, si hay alguien que en este momento quiere ayudar a los yanquis a parar el quilombo, deben ser los chinos. Porque los chinos se preparan para comandar el mundo hace como 60 años, pero el plan es hacerlo dentro de 40. Todo eso dice Manolito, mientras pide más maní japonés.
Pinta lindo la cosa. Me queda la esperanza de que no sabemos nada de economía. Mejor me tomo el subte, tengo planes quinquenales que empiezan hoy.