22 agosto 2010

Leyendo cosas raras para gente normal


Un amigo al que le decimos Brienza y otras veces Hernán publicó hoy, acá, en su nota dominguera, la cita que el otro día le mandamos de un tal Roberto Noble. En ella, pongamos en contexto bárbaros, año 1938, el futuro fundador de Clarín elogia redondamente a Benito Mussolini como "superhombre de Estado".
Era fascista Noble? Qué se yo. Era un clima de época fuerte, digamos. Como ahora hacerse el republicano, digamos también.
Supongo, por ucronía jodona, que Noble no hubiera andado haciéndose el anarquista sin licencia con Fibertel si era tan defensor de un Estado fuerte, que digo fuerte, fuertísimo, como el de la Italia de esos días. 
Qué se yo, repito. Pasan cosas raras. Ponele denunciar una imparable censura y ataques a la libertad desde los medios masivos de comunicación. O admitir, como hace hoy Morales Solá en La Nación, que culpa de los "escraches" de los fanáticos K, algunos periodistas deben andar con custudia o compañía y eso dificulta el acceso a la información.
Será por eso que ultimamente no tienen ni media fuente para fundamentar mucho de lo que escriben y por eso ficcionalizan. Está bien, se entiende.

Como sea: nótese que la cita en cuestión la encontramos chusmeando un libro de Sebreli. Somos así de zarpados y locos. Y además tenemos insomnio por las largas noches de la tenebrosa argentina.

20 comentarios:

Jorge Devincenzi dijo...

No leí a Brienza, pero don Roberto fue hombre de Fresco, y no sería extraño que alguna de las empresas alemanas que luego conformarían el llamado grupo DINIE le haya tirado unos pesos. Más tarde, el desarrollismo que abrazó por interés (las batallas del petróleo, de la petroquímica, del acero, de la soda solvay para hacer papel, etc.)gozaba de un punto clave: podía hacerse con o sin pueblo, lo que explica que el MID de Frondizi terminara siendo un partido quasi-militar. Ese mismo sector, en los 60, comienza a alentar dentro de la dictadura de Onganía, la fabricación de papel prensa.

Ana C. dijo...

Sign "☮" the Times. ¿La admiración por Mussolini la compartía con Perón o es un invento?

Jorge Devincenzi dijo...

Dicho o escrito así, es un invento

Mariano T. dijo...

Sin embargo así era. La gente se dividía en dos. Los de tendencia más liberal, estaban con los aliados. Los de tendencia más nacionalista, con el Eje.

Jorge Devincenzi dijo...

Los liberales eran menos, pero tenían el poder y sobre todo alimentaban a los aliados, de modo que no podían ser otra cosa. Sin embargo, había unos cuantos nazis entre ellos, como pasaba con la realeza británica y el propio Henry Ford en EEUU. Los partidarios del Eje estaban entre las clases populares, los militares industrialistas, y obviamente también los simpatizantes de Hitler/Mussolini. Pero eso no significa que Perón admirara al italiano; eso merecería una respuesta más larga que un comentario.

Diego E. dijo...

Copio y pego un viejo comentario propio en Mundo Perverso. No por el placer de autocitarme, sino porque es menos laburo elaborar dos veces la misma respuesta:

Se ha puesto de moda cuestionar el filofascismo de Perón. Es curioso que se haga desde las páginas de un diario fundado por un lobbysta de los ferrocarriles británicos en el Congreso, admirador de Mussolini, que escribiera cosas como: "Mussolini es el modelo viviente del moderno hombre de estado, y en lo que al genio de raza se refiere, constituye una expresión típica y egregia de la excepcional capacidad que el pueblo italiano ha demostrado en todos los tiempos...
El sueño anheloso de Nietzsche, que predecía para el futuro la implatación de una estirpe directora de superhombres... parece concretarse en este espléndido retoño de los grandes de la antigua Roma. Nosotros, los argentinos..., vemos en el surgimiento incontrastable de la madre latina, el documento fiel y preciso de la influencia ejercida por el genio de Mussolini."
sigue....

La idea no es responder a un "carpetazo" con otro. Alrededor de los años de la Segunda Guerra Mundial, llamada así porque se enfrentaron las potencias económicas de la época, no porque realmente fuera mundial, en la periferia las simpatías se dividían entre los aliados, que eran bien vistos sobre todo por las elites gobernantes, y el eje, admirado por el área que, anacrónicamente, podríamos llamar "desarrollista".

Lo que por estas tierras se admiraba de Alemania e Italia, era el modelo de desarrollo apoyado en las clases populares, porque muchas personas (Perón y Noble son dos entre cientos) veían en el fascismo la solución a un problema que poco tiempo después abordaría Perón: el proletariado sin industria que estaba colmando, sobre todo, la ciudad de Buenos Aires.

Es decir, de Hitler o Mussolini, ninguno admiraba los campos de concentración, que en buena medida se ignoraban en un doble sentido: o no se conocía su existencia, o se la conocía y no se le daba bola. Como hoy no se le da mucha bola, al hablar de Estados Unidos, a los campos de concentración que tiene diseminados a lo largo del planeta.

Pero incluso después de 1945, no se acusó a Perón por sus simpatías filonazis. Eso comenzó después de 1955, curiosamente una acusación dirigida por quienes apoyaron el bombardeo a la Plaza de Mayo.

La división, muy esquemática e inexacta, pero que permite tirar una punta a partir de la cual se puede seguir un estudio algo más serio si uno tiene ganas, sería algo así:
- quienes optaban porque Argentina, y nuestras naciones en general, fueran colonias de las potencias, simpatizaban con los aliados.
- quienes buscaban un modelo de desarrollo que nos permitiera en algún momento competir con esas mismas potencias, simpatizaban con el eje.

Y esto, por favor, no es un elogio u omisión del horror del holocausto. Pero tirarle la masacre judía encima al peronismo -o a Roberto Noble, todo sea dicho- es una chicana un tanto inculta.


Como es probable que en algún momento alguien quiera mencionarlo: con Perón entraron muchos alemanes a la Argentina. Pero también entraron muchos judíos. Curiosamente, los alemanes entraban con pasaportes facilitados por el Vaticano, con cuya iglesia es sabido que en esos años Perón tenía un diálogo fluido. Y muchos países (Estados Unidos en primer lugar) se disputaron el privilegio de albergar a los científicos nazis (el Saturno V es básicamente, el misil intercontinental nazi modificado).

Jorge Devincenzi dijo...

... a eso, lo llamaría desarrollo autónomo. Digamos que Noble y Perón entendieron a Mussolini x lugares diferentes. Hoy lo llamaríamos distintas miradas

Mariano T. dijo...

Los que entraban vía vaticano eran los italianos y croatas. la vía de los alemanes era otra.
Igual debe quedar claro que aquellos para los cuales la democracia, la libertad de opinión y de expresión, el respeto a la minorías, etc era un valor esencial se opusieron firmemente y de entrada a los regímenes totalitarios europeos, que aunque no se supiera lo del genocidio, su caracter dictatorial y totalitario se conocía desde varios años antes de la guerra.

Jorge Devincenzi dijo...

Bueno, ahora sólo faltaría ladrar.

pablo dijo...

Bien por Devincenzi.
Los alemanes también entraron por la vía del Vaticano (muchos).
¿Signo de los tiempos? Puede ser. Ese sueño de nación autónoma era el que fomentó el escritor francés Pierre Drieu la Rochelle, y que casi contagia a Victoria Ocampo. Juntos, asistieron a la marcha del Duce sobre Roma a principos de los 30. Gramsci ya estaba en cana.
Sobre los campos de exterminio y los de trabajo, los ingleses tenían fotos aéreas desde mucho antes que se decidiera la "solución final". A nadie le importó un carajo, y el ejemplo más notorio quizá sea el de Mc Namara cuando dice que Japón estaba destruido antes de tirar las bombas atómicas. Se tiraron igual, para disuadir a Stalin. Son palabras de un tipo que después fue contratado, si no me equivoco, por la Ford que nombra Devincenzi.

Mariano T. dijo...

Bárbaro, parece que el nacional populismo todavía piensa que los nazis y los fascistas eran los buenos de la película.
Y yo que pensaba que eso solo pasaba antes de 1945!

Jorge Devincenzi dijo...

sin olvidar los campos de concentración de japoneses en EEUU y de alemanes en Inglaterra

Gustavo Massa dijo...

Mariano. Pío XII era amigo personal de Hitler. Es sabido que el Vaticano sacó de Europa a varios Nazis, muchos de los cuales se encontraron luego en varios países de América. Es tan fluida la relación de la iglesia y el nazismo, que hoy tiene un Papa ex "camisa negra". Jorge Devicenzi, no olvidemos que la "sociedad" norteamericana llego a condenar a Chaplin al ostracismo por denunciar a Hitler como un dictador. USA nunca fué anti nazi.-
Un cordial saludo

Mariano T. dijo...

Un pariente mío ya fallecido estuvo trabajando en la Embajada argentina en Roma entre 1945 y 1947. Era un abogado recién recibido, y trabajaba en coordinación entre las autoridadse argentinas, el vaticano y las fuerzas de ocupación en la traída de italianos y croatas. Como a mi el tema me interesaba mucho, le hice muchas perguntas. jamás me mencionó el caso de alemanes o austriacos, así que la vía era otra, porque de hecho entraron muchos.

Jorge Devincenzi dijo...

Alemanes e italianos entraron a Argentina por la vía de los monasterios o a través de la Cruz Roja.
No pienso entrar a discutir si Argentina fue un refugio de nazis, con apoyo del gobierno, porque estoy convencido de esto: así como EEUU y Rusia "importaron" miles de científicos, patentes, etc., Perón intentó algo similar.

Mariano T. dijo...

Si, tipo Martin Bormann, Eichmann y Mengele, grandes científicos.
Mejor dar vuelta esa página, para no ser acusado de gorilismo, con un manto de piadoso entendimiento.
Pero no es desde el peronismo que se puede ehar el tema en cara a nadie, ni a Noble, ni al vaticano.
Mejor callarse la boca.

Jorge Devincenzi dijo...

El tuyo, Mariano, es un prejuicio. Esos tipos entraron con apoyo de las empresas alemanas que habían sido incautadas, y es probable que con el apoyo de algunos nazis de la policía federal. Argentina reconoció rápidamente a israel, y la mejor prueba es el caso del abogado judío y del PC asesinado por policías en Santa Fé: antes de setiembre del 55 cayeron todos presos y fueron condenados. Y la Libertadora los dejó en libertad.

Mariano T. dijo...

Hay un hilo de continuidad entre los tres períodos (1943-46, 1946-55 y 1955-56) y es la fracción nacionalista católica del ejército. Son los que acompañaron a Peron hasta que se metió con la iglesia, y despues se unieron a la otra fracción (la liberal) para encabexar la libertadora.

Matías dijo...

Gracias por toda la data, Jorge. Tapando a tu mosca-interlocutor es muy interesante leerte.

Jorge Devincenzi dijo...

Si ando con ganas, voy a postear sobre el tema, que me parece apasionante. En los 90, el menemismo destituyó una de las condiciones peronistas y armó una teoría falsa sobre el apoyo de Perón a los nazis, funcional a las rr carnales. No dará respuesta a las urgencias del momento, pero quizás sirva para quienes tienen necesidad de una formación relacionada con la acción política, que es lo único que cuenta