Balance de Feriado

Llega fin de año y ya estoy cansado de mí. Cansado de llevarme puesto. Me saqué el yeso porque era la encarnación viva de mi imposibilidad de escribir. Y aún así, con la férula puesta, no pasa nada.

Me cansé de hacer una y otra vez el mismo post. Ese que se mofa de los medios. Ese, que ahora podría ser: “Cuántas boludeces hablaron de los Pomar, no?”. Horas y horas de hipótesis pelotudas. Y si se guardan una hipótesis y una investigación para la sucesión de asesinatos inexplicables de los últimos días? No les suena raro nada de eso? Ay, Dios, dame un Ragendorfer.

Me cansé de los posts pseudo analíticos de la actualidad política. Ese que podría ser ahora “Antes los políticos fundaban diarios, ahora los diarios fundan políticos” Y para colmo pretenden que sean ya. Conciben la política –y así la analizan- como si fuera una reunión de cierre. Todo es hoy. Ahora. Ya. Lástima que la política se les caga de risa y sigue, con su tranco cansino, lejos de ahí y les grita: nos vemos recién en la próxima elección general, giles.

No sé si estoy cansado y por eso no se me ocurre nada o si estoy cansado porque no se me ocurre nada.

Hoy anduve en bicicleta, fui a un parque, comí un asado, jugué al chinchón. Así que también cabe la posibilidad de que esté feliz.
Y sea eso.


Tanta Gente - Estelares.