08 marzo 2012

Decadencia

"He nacido en un tiempo en que la mayoría de los jóvenes habían perdido la creencia en Dios, por la misma razón que sus mayores la habían tenido: sin saber por qué. Y entonces, porque el espíritu humano tiende a criticar porque siente, y no porque piensa, la mayoría de los jóvenes ha escogido a la Humanidad como sucedáneo de Dios. Pertenezco, sin embargo, a esa especie de hombres que están siempre al margen de aquello a lo que pertenecen, no ven sólo a la multitud de lo que son, sino también los grandes espacios que hay al lado. Por eso no he abandonado a Dios tan ampliamente como ellos ni he aceptado nunca a la Humanidad. He considerado que Dios, siendo improbable, podría ser; pudiendo, pues, ser adorado; pero que la Humanidad siendo una idea biológica, y no significando más que la especie animal humana, no era más digna de adoración que cualquier otra especie animal. Este culto de la Humanidad, con sus ritos de Libertad e Igualdad, me ha parecido siempre una resurrección de los cultos antiguos, en que los animales eran como dioses, o los dioses tenían cabeza de animales. 
Así, no sabiendo creer en Dios, y no pudiendo creer en una suma de animales, me he quedado, como otros de la orilla de las gentes, en esa distancia de todo que comúnmente se llama Decadencia. La Decadencia es la pérdida total de la inconsciencia; porque la inconsciencia es el fundamento de la vida. El corazón, si pudiese pensar, se pararía".

Fernando Pessoa, Libro del Desasosiego.





2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jaja, brillante Mendieta. Pero no te olvides que: Jah Lives! (children, yeahhh).

Unknown dijo...

Mi amigo: si se encuentra desasosegado, no olvide que en última instancia este ratito que nos toca vivir es nada mas que una escaramuza contra la segunda ley de la termodinámica, una batalla por definición perdida; y que a los luchadores siempre nos sedujeron las causas perdidas.
Le mando un abrazo, que es la forma mas sencilla y efectiva que conozco de disminuir la entropía.